Está claro que en esta misma temporada llegarán momentos en los que tocará sufrir, pero por primera vez en mucho tiempo , al menos yo, el lunes disfruté, solo disfruté, durante los 90 minutos más el añadido estuve tranquilo, y más después del 0-2 de Apoño, que nos daba la tranquilidad , esa tranquilidad que casi teníamos olvidada.
El martes, por eso de que “el mundo es un pueblo” coincidí con una amiga en Tierra Comanche, tan zaragocista o más que yo, (si es que el zaragocismo pudiera “contarse” ) .
Como la mañana acompañaba nos tomamos un café calentico, y hablamos sobre lo que nos une, obviamente el Real Zaragoza.
Recordábamos lo que habíamos pasado en otros años, lo mal que estábamos al día siguiente de que en Anoeta hace dos años la Real nos ganara en el último suspiro. Lo mal que lo pasamos el año pasado “antes del milagro” , todos esos momentos malos que de un tiempo a esta parte nos han hecho sufrir. Incluso sin retroceder mucho en el tiempo, hablamos del día de la Copa con el Granada, del día de Mallorca , aunque todos al final tuvieron salida , quizás de todo ello nos acordábamos con la sonrisa en la boca.
Por fin vemos el futuro deportivo con optimismo, vemos como llegan las navidades y son otros los que están en el abismo, los miramos desde arriba, sin querer ni recordar las navidades en las que nosotros éramos los observados.
Tras una semana sin fútbol nos toca otra con tres partidos. De nuevo perjudicados por los horarios nos enfrentamos a un Levante con casi día y medio más de descanso que nosotros.
Yo confío a pesar de ello en seguir disfrutando con este equipo al que definitivamente nuestro entrenador ha sabido ponerle las pilas, ha metido en la alineación desde el comienzo a “ese italiano que fichamos la temporada pasada” , al tal “Testiculini” , y su mejor aliado, otro con apellido parecido, nuestro Zuculini, un chaval que cae bien , al menos a mi me cae muy bien, al que le saldrán las cosas mal, como el día del Depor o bien como el día del Rayo, pero que desde que sale hasta que se pone bajo la ducha pone todo lo que lleva dentro por una camiseta que es la suya , y seguro que lo será para siempre, esté el tiempo que esté entre nosotros.
De momento será historia del Real Zaragoza, ha escrito su primera línea, pero tras esta pueden llegar muchas más.
Mi padre dice “el que hace lo que puede , no está obligado a más” , Zuculini y por qué no decirlo, todo el equipo , no solo hacen lo que pueden, hacen mucho más que eso, mientras las fuerzas le aguantan y un poquico más allá.
Mientras los zaragocistas, disfrutamos de ese momento dulce, disfrutamos con un equipo que tiene garra, la garra del león, que lucha como hacía tiempo que no veíamos, que gana partidos a base de entrega, de rasmia, que los empata, los pierde, pero lo que no pierde es esa personalidad, que al menos a mi me gusta, esa que Jimenez parece haber sabido transmitir a los suyos que son los nuestros.
Mientras aquí esta mañana fría, bajo cero, los “comanches” dicen alegrarse de que los vayan a eliminar en Copa… tal vez les beneficie, para centrarse en liga…
Yo mientras aquí sigo deseando el poder seguir disfrutando, seguir estando orgulloso de un equipo, el Real Zaragoza, que empieza a dar miedo a sus rivales, que podrá ganar o perder, pero que no da un partido por perdido mientras el de negro … (mejor no hablar de los de negro) , de los tres pitidos que los mande a los vestuarios.
Y eso es todo desde Tierra comanche , hasta la semana que viene , tras dos partidos contra el Levante.
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