No necesito odiar a nadie para demostrar mi amor a mi equipo.

Esta semana es para mí , una de las peores semanas deportivamente hablando, y es mala porque la deportividad, precisamente, se deja de lado por algunos, para olvidarse que esto no es nada más que un partido de liga más.
Y no me refiero a esos que son tontos desde que sus abuelos eran novios, esos que los hay en todos los lados y no usan el fútbol nada más que como una excusa para sacar a flote sus frustraciones.
Me refiero a gente normal, al menos en apariencia, que parece que necesitan odiar a alguien para reafirmar el amor por su equipo.


Es como los del Madrid y el Barsa, que no sabrían que hacer si el otro no existiese.
Yo, lo siento, puedo desear la derrota de otros equipos, muchas veces lo hago, a veces, hasta me sabe malo que mis “equipos no queridos” ganen, pero jamás odiaré a nadie por ser de un equipo, el que sea, y mucho menos, si es el de su comunidad, su pueblo, su región. Porque en el fondo es como yo, él ama a su equipo, se alegra de sus victorias y sufre con sus derrotas.
El problema es cuando no te das cuenta que por insultar al rival, por desearle la muerte, por faltar a sus creencias, nada de eso va a hacer que tu equipo gane.
Esta semana, decía, me la voy a tomar sabática, de las redes sociales, no voy a entrar a ver como gente que defiende la deportividad, gente que parece “de los míos”, se pasan al lado oscuro , llevados por la manada y ponen tonterías varias, en un sentido y en otro, o simplemente jalean, en forma de ME GUSTA o de RT la estupidez que otro pone.
Hoy ya he empezado a ver las primeras y de verdad que no me apetece nada.
Muy valientes tras una pantalla haciéndose los/las gallitos/as, mientras otros zaragocistas nos avergonzamos de tenerlos en nuestro bando.
Además de tener que aguantar las miradas de otros que son como ellos y lo único que les diferencia de estos es haber nacido unos kilómetros más al noroeste de donde nacieron estos.
Lo siento, me retiro, sé que no voy a cambiar nada, o tal vez sí, pero en mi contra, con este escrito y esta decisión, pero me niego a leer insultos, ataques, violencia verbal o en forma de dibujos por parte de nadie.
Por eso, desde hoy hasta posiblemente dos o tres días después del partido, que por supuesto, espero que ganemos y si es goleando y jugando bien, mucho mejor, me tomo un tiempo sabático y me alejo de los blogs y las redes sociales. Porque yo quiero entrar a ellas a disfrutar no a ver instigaciones a la violencia.
A muchos os dejará indiferente, otros pensaréis que soy idiota, no importa, tal vez lo sea.
Pero seré un idiota que no necesita odiar a nadie, para demostrar su amor por su equipo.